- El galardón se otorga anualmente en la categoría agropecuaria .
- Muchas de las fincas se encuentran en proceso de certificación como orgánicas.
Por Marcela Cordero G.
Todas las familias que integran el Programa Bandera Azul, categoría agropecuaria tienen algo en común: el poner como prioridad en todos sus procesos el respeto y armonía con el entorno ambiental. Es por eso que 52 fincas de la Región Caribe ganaron la Bandera Azul 2024.
El galardón fue otorgado por autoridades del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) el 4 de Setiembre en el Centro Cívico de Pococí. Durante el evento se presentó la Banda de Conciertos de Limón, para celebrar al ritmo de la música esta premiación anual.
Roberto Azofeifa, Encargado del Programa Bandera Azul Agropecuaria del MAG, quien dirigió unas palabras, resaltó el crecimiento que ha tenido el programa: “797 fincas y eso es bastante satisfactorio, y si todos se inscribieron continúan, el año entrante vamos a tener mas de 1100 participantes en todo el país, eso es realmente muy considerable”.
Durante el evento, los productores colocaron stands para mostrar sus productos. Además se realizó un intercambio de semillas criollas entre los participantes, con una gran variedad de cultivos.
Una parcela amigable con el ambiente
Entre los galardonados se encuentra la Finca Integral La Parcela, ubicada en Matina, la cual produce productos lácteos, caprinos, porcinos, jabones a base de aceite de coco, yogurt, leche y hasta quesos bovinos. Todos estos tomando en cuenta el equilibrio ambiental.
Otras de las acciones realizan son reciclar los desechos de las compras, hacer eco bloques, o bien lo que se desecha de la finca se desecha para composta o a un biodigestor para abonar los pastos. Todo ello con el objetivo de tener muchos menos desechos.
Jesus Montañéz Caballero, explicó que todos los procesos buscan que se produzcan menos desechos y que buscan mejorarlos año con año. Para ello reciben asesorías del MAG.
“Una de las cosas que mas nos gusta es conocer los proyectos que están aquí expuestos y poder hacer un tipo de red donde nos conocemos finca con finca” comentó Montañez. Esto les ha permitido tener un encadenamiento productivo y compartir experiencias durante los 6 años que han ganado su bandera.
Sostenibilidad como estilo de vida
Anahuen Finca Integral mostró lo que produce alimentos así productos medicinales y de belleza. Pero además cuentan con un banco de semillas criollas muy especial y variado, con semillas como maíz, arroz, café, entre otras.
Ana Ligia Castro Albertazzi contó que esta es su primera
premiación: “El año pasado ya perteneciendo a una asociación eso hizo que fluyera la información y contactar con el MAG. Es mi primer año, una estrella, pero me encanta saber que estoy dentro del programa. Para mí no es un programa, es una forma de vida. Para mi es permanente”.
Albertazzi junto con Luis Elizondo Fallas toman en cuenta los parámetros de Bandera Azul y añaden otras acciones, como dejar descansar la tierra para que se reponga. Esto sin dejar de lado el trato justo, para la gente, para la tierra para los animales.
En Anahuen tienen un banco de semillas, que consideran la base de la seguridad alimentaria. En su terreno de 8.8 hectáreas se siembra arroz, cacao, café, plátano, yuca, tiquisque, entre otros.
Una finca que también es bosque
La Finca Integral la Luisa, ubicada en Barra del Colorado, se compone de 6 hectáreas en transición para certificarse como orgánica y el resto de bosque, que se conforma de 70 hectáreas. Este año ganaron su cuarta estrella, y es su quinto año de participación.
Debido a la gran riqueza natura, esta finca es visitada por gran cantidad de animales: desde aves, serpientes, monos, tepezcuintles. Inclusive, han colocado cámaras trampa donde se observa la visitación de diversas especies de criaturas.
Maria Luisa Fernandez explicó la razón por la cual realiza todas las prácticas ambientales en su finca: “Yo fui a unas capacitaciones y nos dimos cuenta que si yo vivo aquí tengo que hacer el cambio, por las futuras generaciones, vienen mis nietos mis bisnietos, si aquí es donde vivo tengo que pensar que hay que vivir de la mano con el medio ambiente”.
Sostenibilidad y sabiduría ancestral
Se trata de la Finca Casa Aiko, quienes recibieron el galardón por tercer año consecutivo y actualmente cuentan con 4 estrellas. Su proyecto incluye la producción de cacao orgánico, y la elaboración de artesanías como la jícara, canastas y bolsas tradicionales.
Leonardo Buitrago Morales, recordó que las practicas ambientales que son reconocidas por el Programa Bandera Azul, son parte de una tradición milenaria del pueblo Bribri. “Nuestra tradición es siempre mantener las cosas sin químicos, y las semillas tradicionales que son de generación en generación”.
En esta finca se cuenta con gran variedad de cultivos para el autoconsumo, y de esa forma evitar la producción de residuos. “La comida no la compramos. El arroz , banano, plátano, todo lo que queremos tener. También animales como gallinas, pollos, es decir no consumimos productos que no vengan de ahí” explicó Buitrago.
Así como estos, cientos de productores de diversas partes del país fueron reconocidos una vez más por su aporte a la agroecología y la conservación de las riquezas naturales. Este número cada año sigue creciendo, según las cifras oficiales.
La premiación recordó a los participantes que el esfuerzo voluntario, trabajo en equipo y organización de la sociedad civil tiene un importante impacto positivo e incontables beneficios para el medio ambiente y la salud de las personas.